La amistad duradera debe
basarse en los intereses comunes y en las creencias compartidas.
Barbara W. Tuchman
Todas las personas que
compartimos este programa hemos recibido el don de la amistad. Tenemos un
interés común: deseamos permanecer sobrias. Y compartimos la creencia de que un
poder superior a nosotras puede hacernos recuperar la salud. Confiamos en
nuestro compromiso mutuo. Estamos aprendiendo a vivir los principios del
programa en todas nuestras situaciones.
Anteriormente, las
amistades con frecuencia estuvieron ausentes de nuestra vida. Ciertamente
teníamos una amiga aquí y otra allí., pero ¿realmente podíamos confiarles
nuestros secretos? Temíamos hacerlo, y nuestro miedo estaba justificado. Es
probable que nosotras tampoco hayamos sido buenas amigas. La amistad siempre
implica arriesgarnos a ser vulnerables. Significa tomar las decisiones de ser
dignas de confianza y nunca retraemos ante ese riesgo y esa decisión.
Las amistades enriquecen
nuestra vida y nos completan. Las experiencias que compartimos con ellas nos
dan una ventaja en la vida. No es casual que hayamos coincidido., Nuestra
riqueza puede ayudar a otras personas
Debo estar dispuesta el compartir mi intimidad con
mis hermanas en las que confío. Mi fuerza para recuperarme aumentará a la par
que mis lazos de amistad
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